Esto es todo lo que dice el librico de los refranes sobre mar
A burra nueva, cincha amarilla
A donde acaba el novio, empieza el marido
A gusto dañado, lo dulce le resulta amargo
A la aguja, buen hilo, y a la mujer, buen marido
A la mar madera, y huesos a la tierra
A la que da con mal marido, se le va lo comido por lo servido
A la sombra de un hilo, se la pega una mujer a su marido
A nadie le amarga un dulce, aunque tenga otro en la boca
A picada de mosca, pieza de sabana. A poco pan, tomar primero
A poco pan, tomar primero
Aceitunas amargas, con el vino se pasan
Al marido, amarle como amigo, y temerle como enemigo
Al peor marrano, la mejor bellota
Al villano, dale el pie y se tomará la mano
Amar a todos, confiar en nadie
Amar a todos, temer a Dios tan solo
Amar es tiempo perdido si no es correspondido
Amar sin padecer, no puede ser
Amar y no ser amado es como limpiarse el culo sin haber cagado
Amar y no ser amado es tiempo mla empleado
Amar y saber, todo no puede ser
Antes de tomar casa donde morar, mira su vecindad
Buenos y malos martes, los hay en todas partes
Buey amarillento, poco andar y mucho pienso
Burro amarrado, leña segura
Cabrito el de marzo, cordero el de enero
Cada día gallina, amarga la cocina
Camaron que se duerme se lo lleva la corriente
Camarón que se duerme se lo lleva la corriente.
Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente
Cargos son cargas; las menos, dulces, las más amargas
Cree en Dios, pero amarra los camellos
Cuando marzo mayea, mayo marcea
Cuando no hay calor en el nido, lo busca afuera el marido
Cura flaco y marido barrigón, ninguno cumple su función
Dame Dios marido rico, aunque sea un borrico
Darle a una persona todo tu amor, no es un seguro de que siempre te amara
De joven maromero y de viejo payaso
De la mar, el mero y de la tierra el cordero
De la mar, el mero, y de la tierra, el carnero
De la mujer, del tiempo y la mar, poco hay que fiar
De marzo a la mitad, la golondrina viene y el tordo se va
De sabios es el poco afirmar y el mucho dudar
De saltamontes a chicharra poco marra
De verde claro a amarillo, va poquillo
Desde pequeñito le amarga el culo al pepino
Dinero guardado, barco amarrado
Donde hay patrón, no manda marinero
Donde manda capitán no manda marinero
Donde manda capitan, no gobierna marinero
Donde va el mar, que vayan las arenas
Dos veces olla al día, el caldo amargaría
El amor de la mujer, en la ropa del marido se echa a ver
El canal del Manzanares, pocos barcos saca a mares
El corazon conoce la amargura del alma
El marido celoso nunca tiene reposo
El martes, ni te cases ni te embarques
El mejor marido, el que mas ha corrido
El muerto es del mar cuando la tierra lejos está
El que cree en la astrología, se amarga todos los días
El que de amarillo se viste a su hermosura se atiene
El que ha naufragado teme a la mar aún calmado
El que nace pa' martillo del cielo le caen los clavos
El que no se arriesga, no pasa la mar
El que presta su caballo para garrochar, y a su mujer para bailar, na tiene que reclamar
El sol de marzo, da con el mazo
En agosto y enero para tomar el sol, no te pongas el sombrero
En casa del herrero: cuchillo (cuchara, asador, martillo, ...) de palo
En casa del hortelano, siempre es más gordo el marrano
En el marido, prudencia; en la mujer, paciencia
En el mundo como en el mar, no se ahoga quien sabe nadar
En martes, ni te cases ni te embarques
Entre marido y mujer, nadie se debe meter
Es una locura amar, a menos de que se ame con locura
Esperando marido caballero, lléganme las tetas al braguero
Favorecer a quien no lo ha de estimar, es echar agua al mar
Firmar sin leer, sólo un necio lo puede hacer
Hay tres cosas que el ser humano necesita en su vida: alguien a quien amar, algo que hacer y una esperanza para el futuro
Haz lo que ames, porque así amarás lo que haces
Hombre precavido, sabe el horario del marido
La envidia, dice el autor, es martillo destructor
La gallina, la mujer y el marrano, con la mano
La modestia es el arte de animar a la gente a que se encuentren por si mismos cuan maravilloso es uno.
La mujer compuesta quita el marido de otra puerta
La mujer compuesta, quita el marido de otra puerta
La mujer lo hace, y el marido no lo sabe
La mujer poco entendida, se casa sin tomar medidas
La varaicia es mar sin fondo y sin orillas
Lee antes de firmar y cuenta antes de guardar
Llamar al toro desde la barrera, eso lo hace cualquiera
Lo que no está firmado, no está amarrado
Malo es el zamarro de espulgar, y el viejo de castigar
Marzo marzuelo, un día malo y otro bueno
Más ata pelo de coño que maroma de barco
Más vale ponerse una vez colorado que ciento amarillo
Más vale ser un rico labrador que un marqués pobretón
No es lo mismo llamar al Diablo, que verlo venir
No te metas en pleito de marido y mujer, porque se arropan con la misma sabana
Nunca amarga el manjar por mucho azucar echar
Para torear y casarse, hay que arrimarse
Para torear y para casarse, hay que arrimarse
Pelillos a la mar y lo pasado olvidar
Pelillos a la mar, y lo pasado a olvidar
Por un perro que mate, mataperros me llamaron
Porque un día maté a un perro, mataperros me llamaron
Quien no se aventura, no pasa la mar
Quien se quemare, que sople
Repetido y a la larga, lo más dulce amarga
Reza, pero no dejes de remar
Saber amar, es mucho saber
Salud para mí, trabajo para mi marido
Si buen consejo tomara, otro gallo le cantara
Si quieres ver a tu marido gordito, despues de la sopa dale un traguito
Si ves las estrelas brillar, sal marinero a la mar
Soltero maduro mar*c*n seguro
Tantos años al marqués, y no sabe menear el abanico
Una maravilla, con otra se olvida
Unos van al martir, y otros al martinete
Yerro es tomar oficio ajeno y dejar el propio
Yo no siento que mi marido juegue, sino que pierda
Zamarra vieja, más calienta que una nueva
Zamarras y sermones no son para el tiempo de calores
Zapato que le duela a quien sin llamar se cuela
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